La modelo se encuentra en el Hospital Italiano de Buenos Aires, donde permanecía con respirador y sedada. La acompañan familiares y allegados.
Los problemas de salud de Silvina comenzaron cuando se sometió a una intervención estética en el 2011 a cargo del médico Aníbal Lotocki, según ella misma denunció.
Aquel año, la modelo se inyectó biopolímeros en sus glúteos y este procedimiento le produjo una hipercalcemia y una insuficiencia renal en su organismo.
Por este hecho, Lotocki fue condenado por el Tribunal Oral y Correccional N°28 de la Ciudad de Buenos Aires a cuatro años de prisión (y 5 de inhabilitación para ejercer la medicina) por el delito de lesiones graves en una causa que le inició de manera conjunta Silvina Luna con Stefy Xipolitakis, Gabriela Trenchi y Pamela Sosa.
La situación de Silvina es tan delicada que necesita hacerse diálisis tres veces por semana durante cuatro horas cada vez para poder filtrar la sangre, ya que sus riñones no lo pueden hacer porque han dejado de funcionar.