El Senasa detectó la presencia de gripe aviar en dos patos silvestres muertos. El primer caso se había hallado esta semana en Jujuy.

Después de la detección del primer caso de gripe aviar en la Argentina, en la provincia de Jujuy, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) confirmó el segundo en dos patos silvestres hallados muertos en el noroeste de la provincia de Córdoba. La Cámara Argentina de Productores e Industrializadores Avícolas difundió una serie de recomendaciones para actuar sobre los animales y mantener bajo control a la enfermedad.

Los animales fueron encontrados muertos en la laguna artificial Las Mojarras, en el departamento cordobés de General San Martín. Tras el aviso de la Policía Ambiental de Córdoba, trabajadores del Senasa tomaron y analizaron muestras en el Laboratorio Nacional del organismo, en la localidad bonaerense de Martínez. Las muestras arrojaron positivo de influenza aviar, subtipo H5.

Por las potenciales consecuencias que puede tener en la actividad avícola, el jueves se oficializó la Emergencia Sanitaria a través de la publicación de la Resolución 147/2023 en el Boletín Oficial. La decisión se llevó adelante después de hallar gansos silvestres en la laguna de Pozuelos, en la provincia de Jujuy, que portaban la gripe.

Ante la situación, el Senasa se encuentra coordinando acciones de vigilancia con la Administración de Parques Nacionales, los ministerios nacionales de Ambiente y Desarrollo Sostenible, de Salud, y de Seguridad y la Dirección de Fauna Silvestre. Estas medidas incluyen controles en fronteras, acciones de comunicación y rastrillajes de vigilancia en aves que se encuentren en los alrededores de los sitios donde asientan las que son migratorias. El organismo lleva analizada hasta el momento 67 muestras de aves halladas muertas.

La influenza aviar altamente patógena (IAAP) afecta a las aves, tanto de corral como silvestres. Las aves acuáticas y playeras se consideran los reservorios naturales de estos virus y no suelen enfermarse, aunque esto parece estar cambiando ya que se han detectado mortandades de estas especies relacionadas a la presencia del virus H5N1, que es la variante del virus de alta patogenicidad de la influenza aviar.

Es una enfermedad que nunca ha estado presente en Argentina. Desde el Ministerio de Salud de la Nación aclararon que “la enfermedad no se transmite a las personas por medio del consumo de carne aviar y sus subproductos. Por lo tanto, no hay peligro en la ingesta de estos alimentos”.

Sin embargo, indicaron que “las personas pueden adquirir la gripe aviar principalmente a través del contacto directo con animales infectados (vivos o muertos) o con sus entornos contaminados”.