Ariana Arias y una historia de vida marcada por el sacrificio, desde entrenar en la calle hasta estudiar en colectivos de larga distancia y ser convocada al seleccionado juvenil. Cómo se forjó una Leoncita desde muy joven.

Cómo contar la historia de una jovencita que da sus primeros pasos en el hockey más importante del país. Con apenas 19 años Ari como la llaman sus allegados, asentada en su nuevo club, Banco Nación y en el seleccionado.

Arranquemos desde el principio y quien mejor que ella misma para contar esta historia de vida:

“Mis inicios en Alerces fueron en 2012 cuando el club de mí pueblo (Ariana es de Carpintería), dejó de tener hockey. Estuve casi medio año sin jugar porque no conseguía donde entrenar, eso nunca impidió que dejara de practicarlo ya que todas las tardes agarraba mi palo y bocha salía a la calle y jugaba sola o con mi papá”, narra la joven.

“En lo personal en Alerces crecí mucho y todos los años que jugué allí fueron importantes. Cambió mi juego al empezar a jugar en cancha de césped sintético, ya que antes jugaba en cemento o tierra”, cuenta sobre sus inicios.

Cuando hablás de Alerces, ¿cuál fue un momento único?

Llegué a jugar hasta 5ta división en Alerces y lo que más me gustaba era jugar de local para que mi familia y amigos pudieran ir a verme.

¿Qué momentos te marcaron o formaron como jugadora?, los buenos y malos.

Fueron más los buenos que los malos. Desde muy chiquita empecé a viajar sola a San Luis Capital porque no podíamos pagar otro pasaje para que uno de mis padres me acompañe, era eso o no viajar. Eran 2/3 veces por semana que viajaba a entrenar con el seleccionado de San Luis. Lo más difícil fue tener que madurar a tan temprana edad para hacer todo lo que me decían mis papás. Por qué iba a una ciudad no a un pueblo como el que vivía.

Ya que hablas de madurar tempranamente y compromiso con todo lo que hacías, ¿cómo manejaste el colegio?

Obviamente el colegio fue otro factor, ya estaba cursando la secundaria en la Escuela Técnica de Merlo, una escuela de mucha exigencia en cuanto al nivel estudiantil. Me acuerdo que eran más las veces que no asistía al colegio que las que asistía. Nunca me hicieron problema por eso, al contrario, siempre me apoyaron. Mi banco del colegio era la butaca de un colectivo camino a San Luis. Aprovechaba las horas de viaje para estudiar y cuando no llegaba a hacer un trabajo me quedaba hasta tarde en la madrugada para poder presentar todo, siempre fui muy aplicada en el colegio.

¿Cómo decidís ir a jugar a Buenos Aires?, o ¿te llamaron?

Jugar en Buenos Aires es un sueño de cualquier jugador de hockey del interior. Desde muy chiquita empecé a soñar con eso. En 2018 fui en el verano a hacer unas pruebas en un club de Buenos Aires, la realidad es que era muy chica, apenas tenía 14 años. En 2021 empecé a buscar clubes nuevamente porque ya ese año quería ir, coincidí con Banco Nación, donde hice el pase directo desde San Luis, no hice ninguna prueba de jugadoras.

¿Cómo te enteraste y cuándo que ibas a estar en Las Leoncitas?

Fue en junio del año pasado, me mandaron un mensaje por WhatsApp pidiendo que llene un formulario para empezar a entrenar con el Seleccionado Nacional Junior.

La verdad no lo podía creer, ese momento sentí que todo lo que había hecho valió la pena. Lo primero que hice fue contarle a mi novio, obviamente los dos gritando y saltando de alegría. Después llamé a mis papás que también no lo podían creer y estaban muy contentos.

¿Cómo te trataron al comenzar y como fue la adaptación, a un club tan importante?

La gente en Banco Nación es muy buena, nos ayudan mucho. Son personas muy humildes y familiares. Nos ayudaron a conseguir trabajo a mí y a mi novio, siempre están para cualquier cosa que necesitemos. La adaptación con las chicas fue muy rápida también, son súper copadas y entré en confianza muy rápido.

¿Qué objetivos tenés a futuro, ya que recién arranca tu carrera en el más alto nivel?

Mi objetivo a futuro es poder quedar en la lista del Mundial Junior y después también quiero ir a jugar una temporada afuera, de ahí en más que se den las cosas como se tengan que dar. Y como sueño más importante, jugar un mundial con la Selección de Argentina.

La joven jugadora de Alerces que soñó con viajar a Buenos Aires o jugar en el torneo más importante, hoy se pone como meta el seleccionado juvenil, un mundial y quien te dice jugar en las Leonas.

¡¡¡Si la convocatoria fuera exclusivamente por sacrificio y juego, no hay dudas que Ariana Arias pasará de Leoncita a Leona!!!