Bajo el lema “la vocación no justifica la explotación” un grupo de 19 enfermeros que ingresaron en septiembre del 2020 en el Hospital “Madre Catalina Rodríguez” de Villa de Merlo comenzaron un paro por tiempo indeterminado.
Reclaman porque fueron contratados como monotributistas con la promesa de pasar a planta permanente, pero tras dos años de prestar su servicio continúan en la misma situación.
“El lunes se inició el cese de actividad en la maternidad y este viernes se sumaron el personal de terapia intensiva e internación”, confirmó una de las enfermeras que decidió guardar su identidad por miedo a represalias.
En este contexto, manifestó que solicitan “un salario digno, vacaciones pagas e igualdad de condiciones de trabajo”.
“Cada seis meses nos renuevan el contrato y es todo un tema porque en cada renovación nos hacen una prórroga que se tardan dos o tres meses en pagarnos el sueldo. No contamos con ningún beneficio, no nos podemos enfermar y no podemos tener vacaciones”, señaló.
En la misma línea, dio a conocer que hay estudiantes que fueron contratados para paliar la pandemia del coronavirus que se encuentran con la misma problemática.
“Ayer nos ofrecieron un monto de dinero, pero sigue por debajo de la canasta básica por lo tanto decidimos continuar con la medida de fuerza. Pedimos tener el mismo sueldo que carrera sanitaria, queremos igualdad de condiciones que el resto de nuestros compañeros”, expuso.
Enunció que varias oportunidades le han comunicado a la directora del nosocomio Natalia Jerez su reclamo: “La única respuesta que nos dio fue ‘ustedes firmaron y aceptaron un contrato, si no están de acuerdo, hay muchos enfermeros que pueden reemplazarlos’”.
Advirtió que, frente a esto, el personal está con temor a represalias porque les han comunicado que se “deberán abstener a las consecuencias”.
“Estamos muy cansados, tuvimos que aguantar todo lo que fue el Covid sin ningún tipo de reconocimiento, sólo exigencias. Nos dicen que aguantemos, pero han sido dos años de mentiras.