Cada 23 de febrero se celebra en Argentina el día del tambero, en conmemoración a la creación de la Unión General de Tamberos de 1920, una de las organizaciones sindicales más longevas del país.

Este jueves 23 de febrero es un fecha muy especial para todos aquellos trabajadores de los tambos, que sostienen una actividad muchas veces golpeada económicamente, ya que es el Día del Tambero en Argentina en honor a la creación de la Unión General de Tamberos, en 1920, una entidad gremial en la que los distintos productores lecheros del país se reúnen para mejorar sus garantías laborales y trabajar por el cumplimiento de sus derechos.

Tradición campera si las hay en nuestro país, estos trabajadores se centran en ordeñar, producir y comercializar leche o productos lácteos, cuya actividad pertenece al sector ganadero, que en nuestro país maneja distintas razas vacunas para el rubro.

El origen del nombre se remonta a la época en que la civilización de los incas denominaba tambo (tampu en quechua), tanto a los albergues como a los centros de acopio de materiales básicos para la supervivencia, que se repartían a lo largo del denominado Camino del Inca, cada 30 kilómetros (una jornada de camino a pie).

La raza vacuna predominante en los tambos argentinos es la Holando-Argentino, de color blanco con grandes manchas negras, ya que se adapta muy bien a los suelos de ese país

Para obtener una leche sana es fundamental que la ubre de la vaca esté sana y las instalaciones limpias, de lo contrario la leche ordeñada del animal se contaminará rápidamente resultando de mala calidad. En la Argentina el certificado oficial de máxima calidad de leche cruda se denomina Rodeo Libre de Enfermedades, y es el que asegura que la leche está libre de brucelosis.

Para ordeñar la vaca y lograr resultados rápidos y eficaces es necesario implementar un método que simule la succión de la boca del ternero. En el ordeñe manual se extrae la leche presionando la ubre. Enla actualidad este método se emplea solo en tambos chicos, de autoabastecimiento familiar. El ordeñe mecánico se realiza con máquinas especiales que son más higiénicas y permiten una mayor velocidad de extracción sin dañar la ubre.

Luego de ordeñada, la leche posee la temperatura corporal de la vaca, o sea 37°C. A esta temperatura la multiplicación de bacterias es muy veloz, por lo que es necesario enfriarla al instante de que se termina la extracción.

 

CUENCA LECHERA CENTRAL

La cuenca lechera central es una región de la zona centro de la Argentina, entre Santa Fe y Córdoba, que se caracteriza por la gran cantidad de tambos y empresas lácteas.

Según los datos del Censo Nacional Agropecuario, llevado a cabo en el 2002 por el INDEC en la Argentina había, en dicho año, un total de 15.520 establecimientos tamberos con un total de 3.510.318 bovinos de tambo, de los cuales 1.495.551 eran vacas en producción.

Las provincias con mayor cantidad de tambos eran: Santa Fe (con 4.020 tambos y 1.012.356 bovinos de tambo), Córdoba (3.835 tambos y 1.247.729 bovinos) y Buenos Aires (3.117 tambos y 900.968 bovinos.